El segundo punto clave para mi salud ha sido el ejercicio. Por
un lado, ejercicio físico para mover todo el cuerpo y potenciar la circulación
y la oxigenación. Por otro, ejercicios oculares para mejorar mis capacidades
visuales en la medida de lo posible.
Me he acostumbrado a correr cada mañana, unos 15-20 minutos.
No es mucho, pero la constancia cuenta. No fallo ningún día. Así logro sudar y
hacer circular la sangre, dando un balón de oxígeno a mis células. Leí en un
libro sobre la salud cerebral que cuando se hace un ejercicio intenso, durante
un breve tiempo, el cuerpo libera una sustancia llamada óxido nítrico, que
tiene un efecto muy beneficioso, vasodilatador y potenciador de los neurotransmisores.
Aparte de oxigenar, el ejercicio da
energía y potencia todas las funciones vitales.
Además, camino mucho, no menos de una hora diaria, a veces
dos o más. Algunos días llevo un podómetro para contar mis pasos. Dicen que lo
ideal es caminar 10 000 pasos al día, como mínimo. Muchos días sobrepaso esta
cifra y llego hasta doce mil. Procuro ir andando a todos los sitios, salvo que
estén muy lejos. Los médicos explican que, con cada paso que damos, la presión
en el talón bombea la sangre de retorno por las venas de las piernas: ¡más
oxígeno y vitalidad!
Los ejercicios oculares los he explicado en varias entradas
de este blog. Sé que no van a resolver mi problema, no me van a “borrar” las
cicatrices del láser ni la zona dañada por el trombo ocular, pero sí me ayudan
a ver mejor. Son una micro-gimnasia muy localizada, porque activan y
flexibilizan los músculos que rodean el ojo. Cuando una persona ve disminuida
su visión por un daño físico puede aumentar su capacidad visual mediante estos
ejercicios. De ahí que, aunque los análisis y las pruebas señalen que mi visión
debería ser de un 30 %, en realidad mi percepción corresponde a una visión de
un 80 %. Esto no se puede detectar con los aparatos, pero sí con pruebas
funcionales. Veo más de lo que mis órganos visuales podrían revelar, porque he
aprendido a mirar y a utilizar mis
recursos. La gimnasia ocular puede ayudarnos mucho.
Qué interesantísimo blog Joaquín.Sobre los ejercicios fisicos estoy consciente que ayudan mucho y mi anhelo es aumentalos quizás en un gimnasio.
ResponderEliminarSaludos desde chile
Jorge Macías