domingo, 3 de junio de 2018

Aliviar los ojos secos o irritados


Cada vez somos más las personas propensas a sufrir de ojo seco o irritado. La sensación de tener algo en el ojo, que nos pica y nos hace llorar, puede ser muy desagradable e impedirnos realizar nuestras tareas cotidianas con normalidad. En algunos casos graves, incluso puede ser incapacitante.

He pasado unos días con este tipo de molestias y por eso he investigado un poco para tomar medidas. Esta entrada resume lo que he aprendido.

¿Por qué se produce el ojo seco o irritado? Mi oftalmólogo me explicó las cinco causas más habituales.

1.     La edad. Con los años, los lacrimales del ojo se pueden deteriorar y producen menos lágrimas, con lo que el ojo queda deshidratado y se produce sequedad y escozor.
2.     El estrés y el cansancio. Pasar mucho tiempo ante una pantalla, dormir poco, leer en exceso, y las tensiones continuas pueden irritar los ojos y causar sequedad y dolor.
3.     Factores externos que nos producen una irritación temporal: alergia, polen, contaminación, polvo, algún objeto extraño que nos entra en el ojo, una infección, y también el exceso de luz o de sol.
4.     La cirugía. Si has tenido alguna operación o intervención oftalmológica, tus ojos ya no son los mismos y pueden volverse muy sensibles, fácilmente irritables.
5.     El uso de lentes de contacto. En ocasiones puede producir molestias. Hay que tener una buena higiene y mantenimiento de las lentillas, y descansar de ellas.

 ¿Cómo aliviar un ojo seco o irritado?


Lo primero es determinar la causa. Si la irritación es grave y súbita y no identificas el motivo vale la pena una visita al oculista para que descarte una alergia o una infección, que requieren tratamiento con fármacos específicos.

Si sabes que puede ser debido a los otros motivos: edad, cansancio ocular, hipersensibilidad tras una operación, etc., también es bueno pedir consejo a tu oftalmólogo para evitar comprar algún producto o remedio que te pueda irritar más.

Hay tres remedios básicos: las lágrimas artificiales, las gotas para ojos irritados y los baños oculares.

Las lágrimas artificiales pueden ser muy efectivas. Es preferible que sean en monodosis, porque así no llevan conservantes, y que contengan ácido hialurónico y áloe vera, que son muy hidratantes y suavizantes.

Las gotas para ojos irritados, mejor que sean suaves, a menos que te hayan recetado alguna con componentes farmacológicos por problemas de alergia o infección. Las que llevan caléndula y Eufrasia son estupendas.

Cuidado con las gotas para ojos rojos, tipo Vispring. Son vasoconstrictoras, es decir que estrechan los vasos sanguíneos para que el ojo se vea más blanco. Pero no resuelven el problema y pueden perjudicarte. En el blog Cuida tu Vista, el optometrista Ramón García tiene un artículo donde habla de los riesgos de este tipo de gotas.

Los baños oculares pueden ser caseros o de farmacia. Un remedio tradicional y muy efectivo es la manzanilla en infusión. Pero hay que procurar que esté hecha con agua muy limpia y bien filtrada, para evitar que se introduzcan partículas extrañas en el ojo.

El suero fisiológico es otro líquido suave y muy adecuado para los ojos temporalmente irritados. En la farmacia también pueden aconsejarte otros líquidos muy bien formulados que proporcionan un alivio inmediato. Lo ideal es bañarte el ojo con ayuda de una bañera ocular que se suele vender con estos remedios. Para enjugar el líquido, utiliza algún tipo de toallita ocular y evita que los dedos y las uñas rocen las pestañas y el ojo.

En este interesante artículo, el autor de Cuida tu Vista explica con más detalle cuáles son los mejores remedios para los ojos secos e irritados. 

La prevención siempre ayuda


Finalmente, y más ahora que estamos casi en verano, vale la pena tomar algunas precauciones.

Lleva gafas de sol, de calidad y con protección solar certificada. Te evitarán exceso de luz, polvo y partículas extrañas, además de cansancio ocular si vas de viaje, o a la playa, o a lugares muy expuestos al sol.

En la piscina, utiliza siempre gafas de agua para nadar. También vale la pena que sean de cierta calidad. El cloro y los productos que echan a las piscinas son muy irritantes y dañinos para el ojo.
Protégete del viento y el polvo siempre que puedas, con gafas, gorras, viseras.

Vigila con ciertos productos para la piel: cremas, aceites, cosméticos… Aplícatelos sin untar las pestañas y el contorno del ojo. Sus componentes y sus grasas pueden entrar en los ojos y causar mucha irritación.

Como medida preventiva, los días que vayas a la piscina, o que fuerces más la vista, puedes darte un baño ocular por las noches, antes de ir a dormir. Te refrescará y aliviará mucho.

¡Que los ojos secos o irritados no te estropeen las vacaciones!