domingo, 18 de diciembre de 2016

Regeneración de la retina con trasplante de células

En la universidad de Oxford existe una facultad de oftalmología puntera en investigación. El Laboratorio Nuffield de dicha facultad desarrolla su labor en varias líneas de trabajo, y entre ellas hay un grupo especializado en regeneración de la retina. Recientemente ha llevado a cabo una investigación con trasplante de células fotorreceptoras de la luz, para conseguir restaurar la función visual y revertir el estadio final de la degeneración macular. Los resultados son muy prometedores. Se trata, en resumen, de reconstruir una capa de la retina totalmente destruida, lo cual permitiría recuperar la visión perdida.

En este enlace encontraréis el resumen de su trabajo. Y aquí una traducción:

«El reemplazo de células es una de las estrategias para restaurar la visión en la retinitis pigmentosa y en la degeneración macular asociada a la edad. Los pacientes pierden la visión cuando la capa de células fotorreceptoras se deteriora y desaparece. La meta es restaurar la visión en esta fase de la enfermedad.

Hasta ahora no se sabía si una retina degenerada, que ha perdido la capa exterior de fotorreceptores, permitiría la supervivencia, maduración y reconexión de unos fotorreceptores trasplantados, puesto que los estudios realizados siempre han utilizado retinas con una capa nuclear ya preexistente. En este caso, se trataba de observar el resultado en ratones aquejados de retinitis pigmentosa severa, cuando ya no les quedan células bastones (las que captan la luz).


Los investigadores han mostrado que las células precursoras de bastones pueden desarrollar una capa externa nuclear anatómicamente distinta y correctamente polarizada. Los animales que sólo tenían dos capas retinianas antes del tratamiento desarrollaron una estructura de tres láminas. Los precursores celulares introducidos pudieron desarrollarse en el nicho de la retina degenerada, madurar como tejido externo con células de bastón sensibles a la luz y reconectar con las neuronas subyacentes. La función visual, testeada en los mismos animales antes y después del trasplante, fue recuperada en animales carentes de células bastón. Estas observaciones sugieren que una terapia celular puede reconstruir la capa de células sensibles a la luz de novo y por tanto reparar un circuito visual estructuralmente dañado. Más que insertar células fotorreceptoras entre las células retinianas preexistentes, la reconstrucción total de la capa fotorreceptora puede aportar un modelo clínicamente relevante a la hora de investigar estrategias basadas en el implante de células para reparar la retina.»